Cuando llevamos un tiempo realizando algún plan nutricional para bajar
de peso, llega un momento que llega el famoso estancamiento, esto es
simplemente porque pasado un tiempo nuestro cuerpo se acostumbra al
racionamiento que le estamos haciendo y se adapta a ello.
Entra en un modo de ahorro de energía, se ralentiza el metabolismo y
esto hace que aunque sigamos nuestra dieta a rajatabla no consigamos perder…,
yo soy partidaria en estos casos de aumentar el ejercicio físico y tener constancia, pero en
algunas dietas nos proponen o bien hacer un día superlight o todo lo contrario,
un día libre en el que puedes comer lo que quieras, yo le llamo el día punky..
En la dieta Dukan que comentábamos el otro día, le llaman hacer el día
blanco, que consiste en comer básicamente alimentos de ese color, tipo pechugas
de pollo, algún caldito…., dicen que es bastante efectivo, si bueno…..y no
comer nada durante todo el día también, pierdes peso y si te descuidas hasta
las ganas de vivir…
Como punto positivo, solo diría eso….que pierdes peso pero en contra
creo que es demasiado castigo al cuerpo, ralentiza aún mas el metabolismo y
puede hacer que perdamos el rumbo de la dieta por un ataque de ansiedad…
Yo solo recomendaría hacer un día light si llevamos una temporada comiendo
mucho y de una manera desordenada, como nos puede ocurrir durante las navidades
o en periodos de vacaciones…, digamos para hacer una puesta a punto.
En el día punky se supone que puedes comer libremente lo que quieras, se
entiende que tampoco hay que pasarse…, a ver si te va a costar un ingreso por
empacho…
A este día le veo muchas cosas positivas, creo que puedes mantener a
raya la ansiedad porque sabes que si te apetece pecar un poquito puedes esperar
a ese día y es menos pecado…, y por otro lado metes al cuerpo nutrientes que durante
el resto de los días ni hueles, como por ejemplo los azucares, hay que recordar
que, aunque si queremos perder peso hay que racionarlos mucho tampoco es bueno
eliminarlos completamente de la dieta ya que son necesarios, en su justa medida
claro, así que…, ¿qué mejor que meterlos un día de vez en cuando?
Como contra hay que pensar que ese día tenemos que controlar la
ansiedad, a ver si al día siguiente vamos a tener ganas de hacer otros 10 días
punkys mas seguidos…
Y por otro lado el temido efecto rebote…, ya que hemos castigado un poco
a nuestro cuerpo durante un tiempo no queremos que se vengue de nosotros ese
día y nos pongamos encima algún kilillo.
Realmente después del día punky, por lo menos en mi caso, podemos
comprobar que, aunque hemos pecado, el peso no varía mucho y podemos volver
tranquilamente a la dieta normal sin mayores complicaciones y con buenos
resultados.
Lo que si recomendaría es no hacer ese día todas las semanas, yo lo
suelo hacer cada 2-3 semanas o incluso un mes, tener paciencia porque el
estancamiento no dura siempre, tener en cuenta si es porque quizás estamos en
nuestro peso correcto y por supuesto, aumentar el ejercicio físico, esto además
de en el peso nos ayudará a tener mas control en la dieta y a mantener la
ansiedad a raya.
Como siempre, os recuerdo que esta es simplemente mi opinión, pero
vamos, yo en este caso me quedo con el día punky sin dudarlo……y vosotr@s????
Tienes mucha razón, no de restricciones vive el hombre, ¿a quien no le gusta pecar de vez en cuando?.
ResponderEliminarParece que cuando te dan, ese pequeño incentivo, las dietas te resultan mas efectivas.
Cierto!!! Si sabes que de vez en cuando puedes pecar un poquito y no pasa nada....., todo se lleva mejor ;)))
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